En Buenos Aires, dos personas viven en la misma manzana sin conocerse. Martín, un diseñador web plagado de fobias, pasa sus días encerrado en un pequeño departamento, conectado al mundo solo a través de internet. Mariana, arquitecta y recién separada, decora vidrieras mientras intenta reconstruir su vida. Sus caminos se cruzan a diario: ella sube una escalera mientras él la baja, coinciden en el videoclub separados por una estantería. La ciudad los une y los separa al mismo tiempo.