Una adolescente porteña anda en busca de su camino en pleno 1955. No está conforme con su condición de hija de inmigrante - el papá es un siciliano de ideas revolucionarias que se gana la vida como sastre - pero cuando habla francés en sus clases de la secundaria lo hace con acento italiano. Ama la poesía y aveces escribe alguna,
admira a una compañera de origen judío y también a una profesora que la escucha, la estimula, y traba con ella una relación extraescolar. Todo lo contrario de la relación con su hogar y su padre.